16 de mayo de 2020

Divergente

Alguien me dijo una vez, ¿por qué no te centras en una sola cosa?, tampoco dejo de escuchar, "especializate".  Pero sintiéndolo mucho por esas personas que creen que los puentes que cruzamos durante nuestra existencia van a permanecer siempre firmes y en el mismo lugar permitiéndonos transitar siempre por el mismo camino, yo elijo ser divergente. Porque algunos de esos puentes que en su día fueron firmes han ido cayendo, otros han desaparecido y llegados a ese punto hay que seguir reinventándose y buscando otros lugares por donde cruzar y caminar. Además, a lo largo de mi trayectoria artística y creativa me he dado cuenta de que cada emoción necesita un lenguaje distinto para expresarse, al menos mis emociones si lo necesitan. A parte de que pienso que en tiempos de crisis puede resultar más útil ser un hombre o una mujer del renacimiento, acumular y desplegar múltiples conocimientos y aprender a ser creativos. Porque a fin de cuentas también puede ser sano y productivo hacer del caos todo un arte.


Esta navaja suiza loca (en el buen sentido), divergente y multidisciplinar va acompañada de algunos personajes que a veces he utilizado para sacar mi lado más gamberro y contestatario, lo que pasa es que no se si reservarles un espacio aquí o crearles el suyo propio como hice con Ángel Bemol.. . . lo pensaré.