20 de noviembre de 2010

Las estaciones del alma


Sinfonía otoñal
Acrílico sobre lienzo, 30 x 30 cm

Os invito a un paseo a través de los colores otoñales y el reflejo de las aguas cristalinas de otro de mis rincones favoritos, las Fuentes del Marques en Caravaca de la Cruz. La paleta de colores que ofrece esta estación es la inspiración para crear esta sinfonía visual. ¿Podéis escucharla? 



Mirar al mar


El horizonte del sueño (adquirida)

Sigo plasmando las imagenes de mis paseos nocturnos frente al mar. Algunos me inspiran música otros son como una puerta al mundo de los sueños, también hay algo onírico en estos colores, manchas y veladuras.

31 de octubre de 2010

Rememorar


Memory of dreams (adquirido)

Comenzó siendo parte de una serie y acabó teniendo su identidad individual, única e independiente.

Los sueños que se cumplen, que se olvidan, que esperan, tienen memoria. 

24 de octubre de 2010

Tras la cortina


Piel dividida, piel sumada (colección privada)

Salgo del negro y experimento con el color, me gusta el resultado, habrá más en está linea.

Tras la cortina


¿Y si vinieses? (adquirido)

Sirenas en la orilla


Sirena en la orilla (colección privada)

¿Sólo tiene derecho a existir lo que consideramos perfecto?
¿Y donde está lo perfecto en realidad?
Mi primera sirena en la orilla del mundo que abrirá el camino a una serie.

15 de octubre de 2010

10 de octubre de 2010

Tras la cortina


Te espero
Técnica mixta sobre papel, 14,5 x 14,5 cm

Sigo investigando a través de otra gran obra de arte de la naturaleza, nosotros mismos. Rescatando el cuerpo, la piel, de la oscuridad moral o morbosa en la que lo envolvemos a menudo. 

3 de octubre de 2010

El arte tiene alma

Un rey anunció que el que hiciera la cosa más increible se casaría con su hija. Los jovenes se estrujaron los sesos durante días.
El día de la prueba los jueces vieron de todo: algunos comieron hasta reventar o echaron humo por las orejas o gritaron hasta estallar copas o subieron altísimas montañas . . .
Pero nada como el reloj de salón que presentó un concursante. Cuando daba las horas, unas extrañas figuritas bailaban, y florecían rosas que se convertían en cabezas de ángeles. La caja era de madera labrada y la maquinaria de oro. El artista era bondadoso y desde el primer momento se ganó el corazón de la princesa.
Parecía que todo había terminado cuando llegó un hombre corpulento y de un golpe destruyó el reloj, ¡zas! Los jueces consideraron aquello lo más increible y le nombraron ganador.
Pero el día de la boda se abrió la puerta de la iglesia y apareció el reloj, que se colocó entre la novia y el novio. Sonaron las campanas, aparecieron las figuritas, ahora de gran tamaño, y golpearon al novio hasta dejarle K.O. Luego el reloj desapareció.
Los presentes dijeron que aquello sí era lo más increible que habían visto. Y se celebró la boda entre la princesa y el artista. Una obra de arte tiene alma y puede convertirse en algo mágico. ¡Cuidado!

2 de octubre de 2010

Mirar al mar, escuchar al mar III


La canción del mar (colección privada)

Ultimamente el mar me inspira títulos musicales, en este caso las boyas amarillas me parecen notas musicales flotando sobre un pentagrama azul.


Mirar al mar, escuchar al mar II


Serenata nocturna (adquirido)



De nuevo el lienzo y otra vez el mar de noche. Disfruto mucho del proceso cada fase de este cuadro es para mi una obra de arte en si misma y el resultado final me fascina.



Reencuentro


Piel esculpida
Técnica mixta sobre lienzo, 25 x 25 cm

Nuevo reencuentro con el lienzo después de que la tabla y el papel hayan sido hasta ahora los soportes de mis trabajos. Sin renunciar a las técnicas empleadas investigo lo que me ofrecen sobre este soporte. Escojo la figura humana, uno de los temas que más me atraen últimamente, para este camino pictórico y los contraste de color y mancha me ofrecen unas interesante formas expresionistas que dan la impresión de que más que ser creada a través de pinceladas, ha sido esculpida con un cincel sobre una piedra de muy diversos minerales.


26 de septiembre de 2010

Mirar al mar, escuchar al mar


Claro de luna (adquirido)

La música de Beethoven y la luna asomando por el horizonte marino me inspiran este cuadro. de toque impresionista. Quizá por eso cuando viajo a Francia para formar parte de una exposición se quedó allí, en la cuna de ese estilo pictórico. Quizá a quien lo adquirió le resultó evocador.


1 de junio de 2010

Poema Canción Donde Se Explica, Bien Explicado, Que Al Pronunciar Una Sola Palabra Puedes Hacer Tu Biografía



A Dámaso Alonso

La palabra que decimos

viene de lejos,

y no tiene definición,

tiene argumento.

Cuando dices: nunca,

cuando dices: bueno,

estás contando tu historia

sin saberlo.

Luis Rosales

29 de mayo de 2010



¿De qué color son las caricias?


¿Y la risa?


¿De que color es el llanto,


el hambre y el recuerdo?


¿De qué color son los besos,


la inocencia y la calma?


¿De qué color es el adiós?






Vuelvo tras unos meses inmersa en un proyecto, con unas reflexiones.